You are currently browsing the category archive for the ‘Lecturas recomendadas’ category.
«He aquí, hermano mío, lo que pienso de la justicia de Dios; mi camino es todo de confianza y amor, no comprendo a las almas que tienen miedo a un Amigo tan tierno.
A veces, cuando leo ciertos tratados espirituales en los que se presenta la perfección a través de mil dificultades, rodeada de una multitud de ilusiones, mi pobrecito espíritu se fatiga muy pronto, cierro el sabio libro que me rompe la cabeza y me reseca el corazón, y tomo la Escritura Santa.
Entonces, todo me parece luminoso, una sola palabra descubre a mi alma horizontes infinitos, la perfección me parece fácil y veo que basta reconocer la propia nada y abandonarse como un niño en los brazos de Dios.
Dejando para las grandes almas, para los grandes espíritus, los bellos libros que no puedo comprender y menos poner en práctica, me alegro de ser pequeña, pues sólo los niños y «los que se les parecen serán admitidos en el banquete celestial» (Mt 19, 14).
Estoy muy contenta de que «haya muchas moradas en el reino de Dios« (Jn 14, 2), porque, si no hubiera más que ésa cuya descripción y camino me resultan incomprensibles, no podría entrar allí”
Sta. Teresa de Lisieux, L 226.
El libro-entrevista Luz del mundo recoge respuestas francas de Benedicto XVI al periodista Peter Seewald sobre el Papa, la Iglesia y los signos de los tiempos. La conversación ofrece claves sobre los retos de la sociedad actual y la fe y la crisis de la Iglesia. También aclara numerosas cuestiones en torno a cuestiones concretas.
El periodista que realizó el libro-entrevista, el alemán Peter Seewald, destaca en el prefacio del libro que “nunca antes en la historia de la Iglesia un pontífice había respondido preguntas en la forma de una entrevista directa y personal”.
Para el periodista, “cuando se le escucha de ese modo y se está sentado frente a él, se percibe no sólo la precisión de su pensamiento y la esperanza que proviene de la fe, sino que se hace visible de forma especial un resplandor de la Luz del mundo, del rostro de Jesucristo, que quiere salir al encuentro de cada ser humano y no excluye a nadie”.
“En la crisis de la Iglesia, se cifra para él una enorme oportunidad, la de redescubrir lo auténticamente católico -añade Seewald-. Para él la tarea es mostrar a las personas a Dios y decirles la verdad.
El libro-entrevista de Benedicto XVI Luz del Mundo ha vendido 75.000 ejemplares en España en menos de tres semanas desde que saliera a la venta el pasado 24 de noviembre.
Presentamos a continuación algunas de las frases más destacadas del libro.
Publicamos algunos de los pasajes más importantes de la exhortación apostólica postsinodal «Verbum Domini», de Benedicto XVI, en la que recoge las conclusiones del Sínodo de los Obispos del mundo, celebrado en el Vaticano en octubre de 2008, sobre «La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia».
Objetivo: «Deseo indicar algunas líneas fundamentales para revalorizar la Palabra divina en la vida de la Iglesia, fuente de constante renovación, deseando al mismo tiempo que ella sea cada vez más el corazón de toda actividad eclesial» (n. 1)
Religión de la Palabra, no del libro: «La fe cristiana no es una ‘religión del Libro’: el cristianismo es la ‘religión de la Palabra de Dios’, no de ‘una palabra escrita y muda, sino del Verbo encarnado y vivo» (n. 7):
Tradición y Escritura: «Es la Tradición viva de la Iglesia la que nos hace comprender de modo adecuado la Sagrada Escritura como Palabra de Dios. (n. 17)
Sagrada Escritura, inspiración y verdad: «La Sagrada Escritura es la Palabra de Dios, en cuanto escrita por inspiración del Espíritu Santo. De ese modo, se reconoce toda la importancia del autor humano, que ha escrito los textos inspirados y, al mismo tiempo, a Dios como el verdadero autor (n. 19).
Dios escucha al hombre: «Es decisivo desde el punto de vista pastoral mostrar la capacidad que tiene la Palabra de Dios para dialogar con los problemas que el hombre ha de afrontar en la vida cotidiana […] La pastoral de la Iglesia debe saber mostrar que Dios escucha la necesidad del hombre y su clamor (n. 23).
Santa Teresa se comparó a sí misma a un castillo. Se vio como si ella y cualquier persona fuera igual que un castillo. Una imagen que en su tiempo se encontraba en cualquier pueblo y por cualquier camino. Castilla, tierra de castillos.
Cuando a los sesenta y dos años nuestra Santa se puso a escribir un libro sobre la aventura de la fe y de su intimidad personal con Dios, un libro que fuera como el retrato de su alma, comenzó diciendo que su alma y «la nuestra es como un castillo todo de diamante o muy claro cristal».
Esa imagen centró todo el argumento de su libro. Dio unidad de sentido a todas las ideas dispersas que se le fueron ocurriendo. Y como se iba a valer de las diversas estancias en que se divide un castillo por dentro, para describir los distintos espacios que uno tiene que recorrer hasta llegar a la unión con Dios, lo llamó el Libro de las Moradas o del Castillo Interior.
Ella y cualquier persona puede compararse también a un castillo, porque por dentro de sí hay como unas moradas ocupadas por quien uno sabe.
«Cuando uno reconoce su pecado, Jesús puede actuar y perdonar. Desde que Jesús sufrió nuestra debilidad y murió para resucitar, el poder de Dios está oculto en el fondo de la debilidad humana como una semilla que germinará a través de la fe y del abandono. Mientras nos opongamos de mil maneras a nuestra debilidad, el poder de Dios no podrá obrar en nosotros.
Pablo era confrontado de manera aguda con su debilidad, hasta el punto que buscaba un refugio en la oración y suplicaba al Señor que le librase de ella. Jesús no cede sin embargo. No se le suprime la tentación a Pablo, porque le es mucho más provechoso permanecer en ella para que aprenda lo que el poder de Dios es capaz de hacer en el corazón de la debilidad. Ni la fuerza de Pablo, ni su victoria personal tienen importancia, únicamente su perseverancia en la tentación, y al mismo tiempo en la gracia. La gracia no viene a injertarse en nuestra fuerza o nuestra virtud, sino sólo en nuestra debilidad. Somos fuerte cuando nuestra debilidad se nos hace evidente. Es el lugar bendito en el que la gracia de Jesús puede sorprendernos e invadirnos.
Cuando se nos da a conocer nuestra debilidad, algunos huyen. Es preciso tener cierta experiencia del amor de Dios para atreverse a permanecer en la debilidad, y reconciliarse con el pecado.
La santidad no se encuentra en el extremo opuesto de la tentación, sino en el corazón mismo de la tentación. Escapar de la debilidad sería escapar del poder de Dios que sólo actúa en ella. Tenemos que aprender a permanecer en nuestra debilidad al mismo tiempo que entregados a la misericordia de Dios. Sólo en nuestra debilidad somos vulnerables al amor de Dios y a su poder. Permanecer en la tentación y en la debilidad es el único camino para entrar en contacto con la gracia y para convertirse en milagro de la misericordia de Dios».
Es la tercera encíclica de Benedicto XVI en el año quinto de su Pontificado. Está firmada el 29 de junio, en la solemnidad de San Pedro y San Pablo, de 2009. Esta nueva encíclica trata los temas del desarrollo del mundo de hoy, siguiendo la propuesta de Pablo VI en 1967. Temas como la crisis económica, el medio ambiente, la cooperación internacional y la reforma de la Organización de las Naciones Unidas, son tratados por el Papa en contexto de la Caridad en la Verdad.
Con este documento, Benedicto XVI coloca a la Populorum Progressio a la altura de la Rerum Novarum-RN (1891) de León XIII. Con la RN se inició una gran corriente del compromiso social de una Iglesia, abierta a la sociedad y al mundo, preocupada por los problemas de los sectores populares, particularmente obreros y campesinos. Vino después la Quadragesimo Anno (1931) de Pío XI, la Mater et Magistra (1961) de Juan XXIII, la Octogesima Adveniens (1971) de Pablo VI, la Laborem exercens (1981) y la Centesimus Annus (1991) de Juan Pablo II.
Con la Populorum progressio (1967) se ha iniciado una nueva corriente del pensamiento social de la Iglesia, centrada en el tema del desarrollo integral de cada persona y de todos los pueblos. En esta misma línea Juan Pablo II escribió la Sollicitudo rei socialis (1987) y ahora Benedicto XVI nos regala la Caritas in Veritate.
A continuación ofrecemos una síntesis sobre la CARITAS IN VERITATE de Benedicto XVI
CINCO PANES Y DOS PECES
Este breve libro nos introduce en la experiencia de monseñor Van Thuân, testigo de Jesús desde la cárcel.
A partir de fragmentos del mensaje del Papa para la Jornada Mundial de la Juventud de 1997, el autor nos presenta siete reflexiones dirigidas especialmente a los jóvenes. En ellas, bajo el título evocador de Cinco panes y dos peces, nos ofrece su testimonio sobre la importancia de vivir el momento presente, la elección de Dios, la oración, la Eucaristía, el amor con la medida de Jesús, la maternidad de María y cómo renovar el mundo siguiendo a Cristo.
Monseñor François-Xavier Nguyên Van Thuân nace en 1928 en Hue, región central de Vietnam. Es ordenado sacerdote en 1953 y licenciándose en derecho canónico en Roma el año 1958. Obispo de Nhatrang de 1967 a 1975, ese año Pablo VI le nombra obispo coadjutor de Saigón, actualmente ciudad de Ho Chi-Minh. Algunos meses más tarde, con la llegada del régimen comunista es arrestado permaneciendo en la cárcel de 1975 a 1988, nueve de los cuales en régimen de aislamiento. Juan Pablo II le nombró Presidente del Pontificio Consejo de la Justicia y de la Paz y posteriormente le creó cardenal. «Ha fallecido un santo» explicó el obispo Gianpaolo Crepaldi, secretario de este mismo Consejo, al dar la noticia del fallecimiento del cardenal, el 16 de septiembre de 2002. De entre sus diversos libros están publicados «Plegarias de esperanza» (San Pablo, 1997), «El camino de la esperanza» (Città Nuova, 1992), publicado en ocho idiomas. «Testigos de esperanza», «Cinco panes y dos peces» y «El gozo de la esperanza» (Ciudad Nueva, Madrid).
Se le llama el “Libro del Papa”. Y es uno de los “best sellers” de este tiempo. Por lo cual hay que dar gracias al Señor que, por su gran bondad, ha hecho que apareciera este libro en esa categoría comercial, en lugar de otros que ciertamente no valen la pena, ni en sí mismos, ni mucho menos en comparación con éste.
A continuacion presentamos algunas criticas y un fragmento del prólogo de este libro tan recomendable.
Comentarios recientes