La señal de Dios es la sencillez. La señal de Dios es el niño. La señal de Dios es que Él se hace pequeño por nosotros.
Éste es su modo de reinar. Él no viene con poderío y grandiosidad externas. Viene como niño inerme y necesitado de nuestra ayuda. No quiere abrumarnos con la fuerza. Nos evita el temor ante su grandeza.
Pide nuestro amor: por eso se hace niño. No quiere de nosotros más que nuestro amor, a través del cual aprendemos espontáneamente a entrar en sus sentimientos, en su pensamiento y en su voluntad: aprendamos a vivir con Él y a practicar también con Él la humildad de la renuncia que es parte esencial del amor.
Dios se ha hecho pequeño para que nosotros pudiéramos comprenderlo, acogerlo, amarlo.
¡Feliz Navidad!
2 comentarios
Comments feed for this article
26 diciembre, 2017 a 23:07
BXVI
“La luz de la primera Navidad fue como un fuego encendido en la noche. Todo alrededor estaba oscuro, mientras en la gruta resplandecía la luz verdadera.
Todo sucede con sencillez, según el estilo con el que Dios actúa. Dios quiere ir poniendo focos de luz concretos, para dar luego claridad hasta el horizonte.
Es la historia de la Iglesia, que a través de los siglos se convierte en fuente de luz para la Humanidad.”
22 febrero, 2018 a 05:57
Noemi
Paso visitando su blog, les dejo un fraternal saludo desde mi blog http://www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com